Los arquitectos manejamos a día de hoy herramientas que hace 40 años eran ciencia ficción.

Nos han dicho que nuestra función principal es diseñar espacios habitables.

Con los avances de la tecnología ya no solo diseñamos estos espacios, sino que podemos recrearlos hasta el mínimo detalle.

Podemos planificar cada uno de los puntos necesarios para lograr una copia virtual de ese espacio antes de que se dé el primer martillazo.

Las herramientas de arquitectos han pasado de físicas a virtuales, pero sobre todo cuentan con capacidades que un arquitecto analógico ni siquiera podría comprender.

El vertiginoso ritmo de este cambio es una buena razón para reflexionar sobre la historia de estas herramientas virtuales y compararlas con sus antepasados ​​físicos.

¿Te apetece echar un vistazo a un pasado no tan lejano?

Este artículo ha surgido a raíz de leer  9 Architects’ Tools That Have Been Transformed by Technology de Architizer

Evolución de algunas herramientas de arquitectos

DEL TECNÍGRAFO o PARALEX A LOS EJES XYZ

 

 

Recuerdo mi tecnígrafo como una tortura china. Mis santos padres me lo compraron para que pudiera ir más rápido y yo soñaba con la seguridad que ofrecía el sencillo paralex.

Ese gran apéndice alienígena pegado a mi tablero de dibujo, con cabeza giratoria y un transportador de ángulos graduable era ante todo inestable.

Con Autocad y el famoso F3 se acabó para siempre no poder hacer líneas horizontales y verticales perfectas.

Mi obsesión eran las líneas, y sin embargo, el hecho de que las metodologías BIM se basen en la especificación de las propiedades de los componentes es un recordatorio de que los arquitectos nunca dibujamos líneas sino pisos, paredes y techos.

DE LA CINTA MÉTRICA AL MEDIDOR LÁSER o LOS MEDIDORES 3D

 

 

Otra de mis torturas durante mis primeros años de estudiante era acotar y recoger todas las medidas del croquis y trasladarlas al dibujo.

Tomar las medidas de un espacio existente para planificar su transformación es probablemente una de las tareas más frecuentes que realizamos.

Hasta hace poco, la única forma de hacer esto correctamente era a mano, con una cinta métrica, lápiz y papel.

Aunque aún es un método utilizado, los medidores láser de infrarrojos ya han reducido este intenso proceso de medición.

Ahora con la llegada de las cámaras sensibles a la profundidad y el software que puede convertir estas imágenes capturadas a dibujos CAD conseguirá reducir la toma de datos y medidas en un juego de niños.

Es cuestión de esperar un poco para que mejoren los resultados y los precios bajen.

PLANTILLAS DE DIBUJO FRENTE A MODELOS TRIDIMENSIONALES

 

En los días donde se estilaban los dibujos a mano a golpe de tiralíneas, agregar muebles a un dibujo significaba elegir un objeto de nuestra plantilla de símbolos.

Otro punto y a parte era trazarlos con delicadeza para no hacer un manchurrón (más de uno he hecho yo).

El equivalente sofisticado de hoy nos permite incorporar un infinito número de modelos en una amplia gama de software de diseño. Por supuesto todo esto con un solo clic.

A pesar de los avances tecnológicos en esta práctica, el viejo método tenía su encanto. Además, es cierto que no te ataba a decisiones estéticas que pueden ser una distracción a la hora de tomar decisiones más importantes en ese momento.

 

GOMA DE BORRAR ( hasta)  ELÉCTRICA o CONTROL Z 

 

La transformación más simple y puede que más subestimada, es la capacidad de revertir el trabajo que se ha realizado.

Es magia. permitiéndonos un viaje en el tiempo.

La función Deshacer es universal para casi todos los programas de software y, como tal, a menudo se da por sentada.

Antes de esta maravillosa invención, los arquitectos más pro manejaban borradores eléctricos que les permitían salvar dibujos grandes en caso de error o un cambio de diseño de último minuto.

El resto nos conformabamos con la goma de fibra de vidrio y la cuchilla.

 

 

HELIODÓN VS SKETCH UP

 

 

Entender el contexto en el que vamos a construir algo que durará décadas nos ha forzado a idear todo tipo de elementos.

Uno de los factores principales, al que desde siempre se ha dado importancia, es el estudio de sombras.

En el pasado, la tarea era increíblemente trabajosa.

Había que realizar el estudio con un heliodón, un dispositivo que podía modelar los rayos del sol en fechas y horas específicas, pero también era grande y difícil de manejar. 

La verdad es que nunca he tenido el placer de trabajar con uno, pero por las imágenes las conclusiones podrían llevarte unas cuantas horas.

En estos días, la forma convencional de hacerlo es, con un software de modelado en 3-D, siendo SketchUp quizás el más popular. En este caso, incluso es bastante sencillo hacer un vídeo con el movimiento del sol.

El grado de simplificación ha sido asombroso, lo que lo hace potencialmente accesible a todos los proyectos.

 

COPIADORA DE PLANOS VERSUS PLOTTER

 

 

Si trabajas en un estudio de arquitectura con algo de solera, es posible que escuches a delineantes mayores hablar sobre el uso de la copiadora de planos.

Recuerdo que durante mis primeros años como arquitecta, el delineante que llevaba más años trabajando nos contaba todo tipo historias a la hora de hacer este trabajo.

El método principal para producir copias de dibujos implicaba una mezcla química que reproducía la imagen en un tipo especial de papel y que, de regalo, podía producir alguna intoxicación o al menos escozor de ojos.

Desde hace ya tiempo, las impresoras digitales han eliminado el trabajo manual de la ecuación.

La tendencia invita a pensar que pronto podremos despedirnos del papel, y con la llegada de las impresoras 3D quién sabe qué nos deparará el futuro.

 

RETOQUE DE FOTOS Y CORTA PEGA VS PHOTOSHOP

 

 

Lo reconozco, soy de la generación del corta pega (y colorea)

La necesidad de plasmar nuestras ideas más allá de las 2 dimensiones hizo que los que no dibujábamos bien nos engancháramos desde el minuto uno a los fotomontajes.

Imagina el resultado y el tiempo que este trabajo llevaba. Recuerdo mi cajita de personitas recortadas de revistas de distintos tamaños…  Lo sé, vergüenza de la buena me daba.

Gracias a la tecnología llegó photoshop con todas sus posibilidades.

A partir de aquí uno solo puede imaginar cómo evolucionarán estas herramientas en el futuro.

Habrá que esperar para descubrir las historias cada vez más complejas que lograremos a golpe de clic.

 

TABLETA DIGITALIZADORA FRENTE A LA PANTALLA TÁCTIL

 

 

La tableta digitalizadora lleva unas cuantas décadas en circulación. Últimamente se han hecho más populares debido a su gran evolución y coste.

Yo tengo una, pero aún no he pasado la curva de aprendizaje.

Sé que una tableta digital es más adecuada para un diseñador gráfico. Para un arquitecto se limita a aplicaciones para bocetos y revisión de dibujos.

Sin embargo, soy de la opinión que trabajar de esta forma es el futuro.

Puede que en unos años podáis saltar el paso de la tableta e ir directamente a por la pantalla táctil, aunque de momento sea prohibitiva.

 

CATÁLOGOS FÍSICOS FRENTE A CATÁLOGOS ONLINE 

 

 

Por último, qué decir de los catálogos tan necesarios e importantes para conocer los nuevos materiales y sus especificaciones técnicas. 

Que levante la mano al que le guste ojear catálogos y muestrarios.

En todos los estudios donde he trabajado siempre había carpetas aglutinadas repletas de dibujos y anotaciones del fabricante.

Si bien los sitios web de los fabricantes están mejorando constantemente en los últimos años, aún hay trabajo.

Creo que todavía no existen herramientas online eficientes para comparar y seleccionar componentes de construcción. 

Imagino que poco a poco se irá solucionando y esos catálogos pasarán a la historia. 

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Y hasta aquí las herramientas de arquitectos del pasado que están evolucionando y evolucionarán próximamente.

¿A ti qué te han parecido? ¿ Se te ocurre alguna más?

Me encantará que me cuentes si has usado alguna de ellas.