Esta semana la constructora nos ha hecho una propuesta sin pestañear: quieren verter el hormigón desde la cuba y no utilizar la manguera, es decir, dejar caer el hormigón en caída libre unos 16 metros.
La aceleración de la gravedad es la misma para todo, por lo que en principio no debería ser un problema…o sí.
Situación de la obra. Antecedentes.
Pero antes de ir al meollo del asunto, déjame introducirte un poco en la situación de la obra.
Actualmente estamos ejecutando tres pantallas de pilotes de 15 metros de altura y 40 centímetros de diámetro. En total son 160 pilotes.
El hormigonado en la obra se realiza con una bomba tipo trompa de elefante la cual nos garantiza el vertido del hormigón a una mayor profundidad, y hasta día de hoy ya se han hormigonado 97 pilotes.
El proceso que se está realizando en la ejecución de los pilotes es el siguiente:
- Replanteo y ubicación de los pilotes a ejecutar (siempre de manera alterna).
- Perforación del agujero de 40 cm de diámetro y 15 metros de profundidad hasta llegar a la roca.
- Confección y colocación de la armadura de hierro.
- Extracción del agua de lluvia que haya podido entrar en el agujero.
- Fabricación y colocación del hormigón.
- Curado del hormigón (48 horas).
- Y comenzar de nuevo el ciclo.
Cada hormigonera completa tres pilotes.
Pero para que compense el desplazamiento de la bomba se espera hasta que haya unos 18 pilotes preparados para hormigonar. Lógicamente si la bomba tuviera que venir cada 3 pilotes no compensaría ni en tiempo ni en costes.
El problema principal del sistema actual y que la constructora intenta evitar es que se trata de un proceso no continuo, separando las actividades de perforación y hormigonado.
Y cada cambio de actividad tiene su pequeño tiempo de parada y descontrol. Esto condiciona enormemente el avance y la productividad del trabajo diario.
La conclusión es que la obra va muy pero que muy lenta, y eso sin contar con los días de lluvia.
Pero vamos a lo realmente importante: ¿se puede hormigonar en caída libre?
Lo que dice la norma sobre la puesta en obra del hormigón.
“Artículo 70º.-Puesta en obra del hormigón de la EHE -08 (norma española para estructuras de hormigón estructural)
70.1 Colocación
En ningún caso se tolerará la colocación en obra de masas que acusen un principio de fraguado.En el vertido y colocación de las masas, incluso cuando estas operaciones se realicen de un modo continuo mediante conducciones apropiadas, se adoptarán las debidas precauciones para evitar la disgregación de la mezcla.
No se colocarán en obra capas o tongadas de hormigón cuyo espesor sea superior al que permita una compactación completa de la masa.
No se efectuará el hormigonado en tanto no se obtenga la conformidad de la Dirección de Obra, una vez que se hayan revisado las armaduras ya colocadas en su posición definitiva.
El hormigonado de cada elemento se realizará de acuerdo con un plan previamente establecido en el que deberán tenerse en cuenta las deformaciones previsibles de encofrados y cimbras.”
Como ves, no dice nada de la caída libre ni de la altura. Sin embargo,en los comentarios añade:
“El vertido no debe efectuarse desde gran altura (uno a dos metros como máximo en caída libre), procurando que su dirección sea vertical y evitando desplazamiento horizontales de la masa.
El hormigón debe ir dirigido durante el vertido, mediante canaletas u otros dispositivos que impidan su choque libre contra el encofrado o las armaduras.”
Por lo que la norma sí menciona que la distancia debe ser máximo dos metros, aunque no lo exige.
¿Es bueno verter el hormigón en caída libre?
De momento todo nos indica que no, pero es cierto que la constructora ha hecho sus deberes, pues nos adjuntó unos estudios americanos y sus razones para que reconsideremos esta opción.
Aluden que, siempre partiendo de que la función principal de los pilotes tangentes sólo es la de muro pantalla y no tienen que soportar cargas verticales, las ventajas de colocar el hormigón a través del camión hormigonera con canaletas en caída libre son las siguientes:
- Se realizaría el hormigonado cada dos o tres agujeros ejecutados.
- Los agujeros estarían menos expuestos a las condiciones climáticas implicando menores derrumbes.
- Se podría lograr un proceso continuo perforación – hormigonado, pudiendo solapar las actividades restantes. Todo esto redundaría en una productividad mayor del trabajo.
Como ves, no sólo hay un factor a tener en cuenta sino que siempre hay ventajas y desventajas para elegir un caso u otro.
¿Cuál es la altura optima de caída libre de hormigón?
La caída libre del hormigón, de alturas de hasta 46 metros, directamente sobre la armadura, no altera las propiedades del hormigón.
Al menos cuatro estudios sobre el terreno demuestran que la caída libre del hormigón de gran altura no reduce su calidad.
1. Reporte de Baker y Gnaedinger (1960).*
2. Test Dupont (1979).*
3. Pruebas del Departamento de Carreteras de Alabama (1992).*
4. Pruebas de la FHWA (Federal Highway Administration) (1994).*
En ninguno de estos elementos de hormigón se percibieron signos de segregación después del hormigonado ni tuvieron una reducción en la calidad o resistencia de los elementos.
*Si quieres saber más sobre estos ensayos puedes descargarte las conclusiones en el pdf descargable.
Y a ti, ¿qué te parece?
¿Les dejarías verter el hormigón en caída libre o seguirías con el método actual? Espero tu respuesta en los comentarios.
La semana que viene te explicaré la decisión definitiva.
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