Entrevista a Rocío Tapia de arquicoach

Segunda entrevista en  arquitectos al desnudo.

Hoy contamos con Rocío Tapia,  la puedes encontrar en www.coachingparaarquitectos.com

Durante estos días he podido comprobar que Rocío es de esas personas que tienen claro sus valores, es muy sincera, y lo mejor de todo,  te hace cuestionarte las cosas, y considero que eso es una habilidad muy especial y necesaria en los tiempos que vivimos.

 

Agradecerle una vez más su generosidad al aceptar participar en este proyecto que estoy empezando y ya sin más os dejo con la entrevista:

1# ¿QUÉ ES ARQUICOACH?

Aunque actualmente está muy de moda el mundo del coaching,  y parece que en general es una profesión en auge, no todo el mundo sabe en qué consiste.

Si lo tuvieras que definir brevemente ¿cómo lo harías?

Es un proceso de entrenamiento en el que aprendes a pensar por ti mismo, en el que quitas lo que te sobra y limita para descubrir tu potencial y ser la persona real y empoderada capaz de construir su objetivo y sostenerlo en el tiempo.

Si entrenas tu cuerpo, ¿por qué no tu mente?

En tu descripción añades  que eres experta en Metaarquitectura.

Háblanos más de este concepto, y de exactamente en qué consiste.

Se me quedaba corto el tipo de coaching que aprendí en su momento. Por mucho que yo me enfoque en la acción si no integro las diferentes áreas de la vida que quiero vivir, tal vez consiga mi objetivo, pero quizás dejándome coja, y llegará un momento que me saltará a la cara. Y si a la hora de integrarme no suelto lo que he heredado de los roles en los diferentes grupos o sistemas a los que pertenezco (el principal es el familiar; pero también los diferentes grupos culturales, científicos, sociales, profesionales, educativos, religiosos, espirituales y etc), pero que no es mío, seguiré desperdiciando todo mi potencial porque viviré un choque entre mi verdadera naturaleza y cualquier ley, costumbre o norma consciente y subconsciente (soterrada) de estos grupos con los que tenga algún nexo.

En la familia heredamos programas de 5 a 6 generaciones hacia atrás que están muy influenciados por todos los demás sistemas ya mencionados, como si se tratara de las muñecas rusas. Cuando hay guerras, conflictos de dinero y cualquier experiencia vivida en solitario y que genera un gran bio-shock produce una serie de memorias que regalamos de generación en generación a nuestros hijos, con los que ellos en su momento repetirán patrón de comportamientos caducos creando pasados en su futuro. Nuestra responsabilidad consiste en soltarlas, comprenderlas e integrar su aprendizaje, y trascenderlas, para que ellos hereden la menor ignorancia posible. Esto mismo pasa en los otros sistemas, incluido el profesional.

Sabemos que estamos reparando por lealtad sistémica algo, cuando no ganamos suficiente dinero para valernos por nosotros mismos como adultos, cuando siempre damos con los mismos tipos de posibles parejas y patrones de relación de cualquier índole personal y profesional. (Si siempre das con el mismo tipo de jefe o el mismo tipo de clientes o colaboradores, ya sabes). Cuando el trabajo que tenemos es precario, cuando parece que me tocó la tarjeta del perdedor y me tengo que dejar esclavizar a costa de otros que ganan todo. En definitiva cuando siempre nos encontramos con el mismo patrón en situaciones con el mismo hilo conductual en el que nuestra naturaleza de genio creativo se va por el desagüe.

Nuestra naturaleza no es la del miedo, base de la cultura occidental en la que estamos inmersos.

¿Y qué es lo que sienten los miembros de la cultura profesional de la arquitectura en nuestra cultura occidental?

Miedo.

La Metaarquitectura es una metodología que saca todo esto a la luz para que l@s arquitectos dejen de reparar, integren sus partes, y vitamina, mineraliza e innova una cultura profesional que acoge a los arquitectos del siglo XXI. 

2# EL ORIGEN DE ARQUICOACH.

De arquitecta a coach, parece un gran cambio de profesión.

Yo creo que ambas profesiones tienen mucho más en común de lo que pensamos, por ejemplo ambas necesitan una gran capacidad de crítica, autocrítica  y reflexión.

También hace falta  ver las necesidades de tus clientes por encima de otros aspectos.

¿Qué similitudes encuentras tú entre ambas profesiones?

Mientras  que el enfoque de la primera nace del sacrificio del profesional que lo hace posible ya sea en honorarios como en tiempos de trabajos eternos, como en la exclusión de áreas vitales de los profesionales de la arquitectura, el enfoque del segundo nace del desarrollo.

Arquitectura y Metaarquitectura se unen en el sentir, en la percepción, en las relaciones, en las conexiones invisibles y de relación que entretejen una geometría concreta. No solamente construimos geometría en arquitectura, también lo hacemos en nuestras relaciones con nosotros mismos y con los demás en forma de patrones. Este tipo de relacionarnos parte de nosotros donde tienen un gran peso los programas subconscientes o memorias heredados con el que actuamos, que ya mencioné antes.

 

En tu página nos cuentas cómo comenzaste a formarte en el mundo del desarrollo personal. Un mundo realmente apasionante y en el que has profundizado en muchos puntos. 

¿Cómo y cuándo decides que te quieres dedicar al coaching? ¿Has aparcado del todo la arquitectura?

En 2007 realicé un Programa Experto en Project Management Inmobiliario siguiendo una inquietud. En esta formación conocí a Lourdes Rodríguez, una de las autoras del Libro Blanco de la DIP. En una breve conversación me dijo que yo había estado haciendo management toda mi vida sin ser consciente. Entonces caí en la cuenta que lo que realmente me llamaba la atención del PMI o la DIP eran el liderazgo y los equipos. En 2008 buscando una página web sobre esto, di con una de coaching y se abrió ante mí un nuevo mundo y una nueva forma de entender el trabajo y las personas que lo hacen posible.

En 2010 vi por streaming un congreso del futuro del empleo en España. Cuando escuché la ponencia de Maravillas Rojo diciendo que se iban a destruir muchos puestos, que incluso profesiones enteras iban a desaparecer y que además se iban a crear otras nuevas de las que aún no había constancia, me pareció lógico e incluso respiré. Por eso respondiendo a tu pregunta de si he aparcado la arquitectura, la respuesta es no. Le he dado mi forma, la Metaarquitectura.

3# LOS CLIENTES DE ARQUICOACH

Pudiéndote focalizar en otro tipo de perfil decidiste apostar en ayudar a los arquitectos. No creo que seamos unos  clientes fáciles.

¿Por qué decidiste que querías compartir tus nuevos conocimientos con los arquitectos y centrarte en nosotros como clientes?

Lo supe.

¿Cuáles son las mayores dificultades o bloqueos que has detectado en nuestro colectivo?

El apego a una identidad forjada durante nuestros años de escuela en la forma de entender la profesión. Es como si se hubieran pegado el título con pegamento en la piel. Pero, yo no nací siendo arquitecta y eso de la vocación… es un mito y te lo dice alguien que pensaba que lo suyo era vocacional.

Cambia “vocación” por “voluntad”, por la voluntad de sentirme de cierta manera y de verme de cierta manera. Con eso generamos una imagen, un imago que después hay que reajustar a realidad, cosa que no se ha hecho aún en general, y de ahí las tortas y las poses.

4#  La reinvención o diferenciación

Los tiempos que corren para los arquitectos no son fáciles, el desánimo y la frustración es el día a día de muchos compañeros.

Muchas otras profesiones han sabido reinventarse y reenfocar su profesión.

¿Consideras  que nos está costando más a los arquitectos REINVENTARNOS o diferenciarnos entre nosotros?  Y si es así, ¿por qué es debido esto?

Durante un tiempo utilicé esas palabras “reinvención y reenfoque”, porque no me gustaba “reciclaje” ya que me daba la sensación de que había que dar otro uso a “algo viejo y en desuso”. Hoy día lo llamo transformación: “quitar lo que te sobra y limita, y alinearte con tu naturaleza”.

Mientras que en EEUU es muy habitual pasar de un perfil laboral a otro sin mayores traumas, aquí no es así aún. Esto tiene que ver con el sentido del fracaso heredado de la tradición judeo-cristiana. Existe una identificación con un imago o imagen con matiz de “para siempre”.

Les cuesta a aquellos que se sienten muy identificados con una imagen concreta de ese imago que se han forjado. A otros no.  

5# La endogamia en arquitectura.

El mundo de la arquitectura es bastante cerrado, parece que todo está concebido para continuar alimentado nuestro ego  y eso provoca en muchos casos que seamos percibidos como un grupo separado del resto de la sociedad.

¿Tenemos los arquitectos miedo de romper la endogamia en la que vivimos?

Algunos sí, otros muchos no.

¿En qué crees que estamos fallando a la hora de presentarnos frente a la sociedad?

La cultura profesional está basada en estas dos pautas a transformar:

1ª. Un perder-ganar. “Yo tengo que perder para que ganes tú”.

2ª. Un ganar-perder. “Yo gano a costa tuya”.

En ninguno de los dos casos existe un “nosotros”. Eso de que trabajamos genial en equipo es otro mito. Trabajar en equipo no es hacer lo que un mandamás te diga porque sí mientras te fastidias tú.

¿Qué pasa?

Que al cliente, del que muchos se quejan cuando siguen la 1ª pauta,  le llega esta incoherencia y a la sociedad por ende también.

Para que exista un “nosotros” hay que ir al triple win: ganar-ganar-ganar. “Yo gano, tú ganas, existe un nosotros luego nosotros ganamos”.

Y de ahí llegamos a lo que digo en mi página del 4WIN: “yo gano- tú ganas- nosotros ganamos- la sociedad gana”.

Mientras que ese primer nosotros no se de en nuestra cultura profesional, la sociedad nos estará mostrando nuestra incoherencia. Y ese nosotros no se dará mientras no se dé el primer “yo gano”, es decir: yo me respeto, me responsabilizo de mí, soy honesto y soy valiente. Esto es, para que el “nosotros” llegue tiene que haber un autoliderazgo en cada uno de los miembros del colectivo y entendernos acompañados desde ahí, no desde el borreguismo. 

¿Cuál crees que podría ser un paso para acercar nuestra profesión a la gente de la calle?

La coherencia. Crear primero el “yo gano”, porque dónde anda nuestra autoestima. Si está por el inframundo ya sabes que hay rescatarse. Después entender que el otro es un reflejo mío que también quiere ganar y tiene su corazoncito, como yo. Y así llegar al “nosotros”, forjando así el caldo de cultivo nutricio y necesario para que los arquitectos prosperen sin precariedad, sin autoesclavitud, sin reparaciones.

  6# ARQUITECTOS VS EMPRESARIOS.

Para mí, uno de los grandes problemas que tiene nuestra profesión, tanto trabajando por cuenta ajena como propia, es que nos cuesta entender que nuestro trabajo no deja de ser un negocio.

Puede parecer frío y sin pasión, pero trabajamos por dinero.

Todo esto está provocando que nosotros mismos no valoremos lo que hacemos y estemos tirando los precios por los suelos.

  ¿Dónde crees que está el problema?

El dinero es un medio con el que te facilites engrasar el resto de maquinarias con los que construyes tu vida. Que uno se pelee con ello, es tema sistémico a liberar que forma parte del imago sobre la mentira vocacional de origen y el sufrimiento del sacrificio.

¿Se solucionaría educando a la sociedad de todo lo que conlleva para el arquitecto un proyecto?

Por sentido común, ¿Qué puedo abarcar yo? Mirar lo que hay en mí e instruirme con lo que necesite. Más que educar en el sentido de dogmatizar es mostrar, sacar a la luz. Mira aquí otra falta de coherencia, enseñarnos en la escuela es clave: ¿en cuántas escuelas se pasa por encima el tema de los costes, precios y honorarios?

¿Los colegios de arquitectos podrían hacer algo al respecto?

Cuidarnos, ser un núcleo de actividad, un ecosistema como lo que expongo en este post escrito durante la campaña de elecciones del COAM del 2015 para elegir Junta de Representantes, y Decano y Junta de Gobierno, (y que se usó en la campaña): http://www.coachingparaarquitectos.com/el-nuevo-colegio-de-arquitectos-ecosistema-urbano-y-caldo-biologico/

Y desde aquí, si me permites Elena, mi deseo es que se lleve a la realidad lo que él inspira y en el que muchos arquitectos y arquitectas se han visto reflejados.

7# UN CONSEJO DE ARQUICOACH para arquitectos

¿Cuál sería tu mejor consejo para poder  redirigir  y adaptar una profesión inicialmente escogida por vocación y que tantos años cuesta acabar?

La vocación es un mito. Una patraña del ego distorsionado con el que nos sentimos especiales por una maniobra de comparación con respecto a los demás. Solamente de un 5% a un 10% de la población mundial une vocación con misión en su trabajo escogido.

En esta profesión e incluso en la propia formación experimentamos, está vivito y coleando el “sacrificio”. Mi teoría es que es una mentira que hemos heredado para autoesclavizarnos sin saberlo, sintiéndonos muy especiales a cambio. Cualquier profesión donde aparezca la palabra vocación habla de herencias sistémicas que gritan con un sonido sordo y sufriente el momento de ser liberada. Así que como ya he mencionado, hablemos mejor de voluntades.

“Ayer tuve la voluntad de la arquitectura que aprendí en una escuela cuya lógica se basa en crear arquitectos de revista”.

(Y los arquitectos de una revista salen estáticos en sus fotografías, no se les ve comiendo, bebiendo, ni yendo a un baño, o disfrutando de su pareja si la tienen o de sus hijos. Siempre es una pose muy estática, nada viva, nada biológica… muy fría, muy distante formando parte de un imago. Pero, yo me pregunto, ¿y qué precio han pagado ellos? Eso no viene en las revistas).

Y prosigo, ya que si ayer fue esa mi voluntad: “hoy mi voluntad es la Metaarquitectura y me doy permiso para transformar mi voluntad y realinear rumbo para viajar en esta vida (que es pura transformación) como el agua que fluye en el río que nunca es la misma, con sentido de aventura y de curiosidad, y regalarme el gran secreto de descubrir mañana cuál será mi voluntad”.

Así es más fácil, al permitirse los cambios, nos permitimos ser vida y formar parte.

Rocío Tapia

Arquitecta Coach, especialista en Metaarquitectura.

www.arquicoach.com | contacto@arquicoach.com

Si tienes algo que aportar o alguna duda, compártela en los comentarios.